El Blog de Emilio Matei

viernes, 25 de octubre de 2013

El francotirador

El francotirador
El francotirador pertenece a un grupo islámico. Uno de los tantos que pelean en Siria. Y cuando actúa no se diferencia de los otros de su mismo oficio. La prueba está en los hospitales, tantos hombres de distintas confesiones que yacen con piernas inútiles, emasculados, sin controlar esfínteres. Los que sobrevivieron a la pericia del francotirador. Que sabe tener paciencia, cómo apuntar, adónde apuntar. Y apretar el gatillo en el momento preciso. Hacer estallar una vértebra. Y si hubo suerte, oír los gritos desesperados del herido que obligará a alguno de los suyos a arrastrarse para rescatarlo. Uno que no puede soportar la desesperación de un amigo, de un camarada, de uno que pelea por lo mismo que él. Y se arrastra, y trata de agarrarlo cuando el francotirador da en la diana otra vez. Y ahora son dos los que gritan. O a lo mejor no, a lo mejor sólo se desangran de a poco sin terminar de entender qué fue lo que les pasó. O habiendo entendido, lo que es mucho peor. Y si alguno de los suyos queda con dignidad, alguno de los suyos se arrastrará también. Y el francotirador se sentirá muy feliz por tan buena cosecha desde una sola posición.
El resto es posible que huya. Y desde ese día tendrá que llevar en sus sueños la cobardía de no haber hecho nada por un amigo, por un camarada, por uno que peleó por lo mismo que él. Sí, buena cosecha para un francotirador.
Más tarde, si hay suerte, alguno de los heridos todavía estará vivo. Sin piernas, sin masculinidad, sin poder controlar esfínteres. Y será llevado a un hospital.

Estas historias, o parecidas, cuentan los francotiradores que actúan en Siria. Si quieren saber a qué grupo islámico pertenecen, la respuesta es que a cualquiera. 

martes, 22 de octubre de 2013

La regla que corrige la emoción

Para un escritor decir que algo es inefable, es decir, que no se pueda decir, explicar o describir con palabras, es equivalente a confesar una incapacidad como escritor. No se trata aquí, para el escritor, de hacerlo bien o mal, se trata de rendirse en el terreno en el que rendirse no debería ser posible por estar en la propia naturaleza de su creación y de las herramientas creativas de las que dispone.

En el caso de los artistas plásticos, la inefabilidad pasa por la incapacidad para usar las herramientas del plástico y cambiarlas por las del escritor. Explicar o completar la obra con palabras, con textos escritos, implica el abandono de la materia de la cual una obra plástica está hecha por su incapacidad, la del artista claro, para expresar ciertas cosas.

Reconozco un cierto grado de arbitrariedad en lo que acabo de escribir ya que establece una limitación a la acción del artista al crear su obra. Y toda limitación puede encorsetar a algún artista que, a lo mejor, consigue hacer un hallazgo en el lugar en que las dificultades parecen convertirse en imposibilidades. Pero de todos modos me parece que el razonamiento que expongo, con las debidas licencias, es mejor tenerlo en cuenta que negarlo o desconocerlo.

Georges Braque
Otro campo, pero éste en el que plásticos y escritores conviven en la teoría, es el de la innecesidad de la razón en la creación de la obra de arte. Desde la razón no se crea nada válido, dicen, sólo desde los sentimientos.
Por más que esta discusión haya terminado en el siglo XVIII, vuelve una y otra vez, a lo mejor por la falta de formación cultural de artistas, más allá de lo bueno que sean al crear en su arte.
El arte como juego y como fusión entre razón y sensualidad ya fue pensado por Baumgarten, Kant, Schiller, Hegel, Fichte, Adorno, Marcuse y tantos otros filósofos. Ser artista no convierte a nadie en filósofo, como ser filósofo no convierte a nadie en artista. En este sentido la modestia le vendría bien a muchos cuando actúan en el terreno que no les corresponde. Ya que si bien todos tenemos derecho a pensar y a  tener opinión sobre cualquier cosa, no todo pensamiento que tengamos será válido, interesante o significativo, mal que nos pese.
Si un artista sólo trabaja desde la razón, es posible que alcance lo bueno, pero nunca lo bello, negando de este modo su condición de artista. Y si un artista trabaja desde la pura sensualidad, no podrá distinguir entre lo que sale de sus manos y lo que sale de su ano.
Sobre este tema me quedo con la frase de  Georges Braque: J’aime la règle qui corrige l’émotion. Amo la regla que corrige la emoción.

martes, 15 de octubre de 2013

Qué significa que Estados Unidos entre en cesación de pagos

Qué significa que Estados Unidos entre en cesación de pagos, en cuánto puede afectar.

No se salva ni Cristo
Homenaje a León Ferrari
El valor de una persona es, en Estados Unidos, su patrimonio. Por si no quedó claro, en el lenguaje coloquial: si Juancito vale un millón de dólares es que Juancito tiene un patrimonio de un millón de dólares.
La derecha del Partido Republicano, la del Tea Party, la más fundamentalista, intenta conseguir que se explicite lo que es Estados Unidos hoy en día. Es gente a la que no le gustan los eufemismos: uno es lo que uno vale, uno tiene lo que uno es. Moraleja, sólo los ricos y sus adláteres, obsecuentes y esclavizados, tienen derechos, que por algo será que tienen lo que tienen. Y lo que vale para la sociedad, vale para los países del mundo. Ya que todos los países del mundo valen menos que USA.

Para los que vivimos en países latinoamericanos no nos resulta desconocida una situación en la que una moneda, cuyo valor fue sostenido de forma completamente falsa durante algún tiempo, caiga a su valor real o, tal vez, más bajo aún. Más bajo aún para que algunos economistas iluminados digan que es bueno tener un colchón para sostener el valor que apenas se establece, ya vuelve a seguir la pendiente de siempre.
El valor del dólar, falso, se sostuvo mucho más tiempo que el de cualquier moneda latinoamericana. Y probablemente se podrá, o se hubiera podido, mantener aún más. A lo mejor hasta que los grandes capitales se hubieran deshecho de los billetes, tal vez por el método de la desvalorización, previo intercambio por toda la tierra, todos los bienes y todas las industrias existentes.
Por supuesto las cosas en el mundo real no son tan claras. El neoliberalismo sin duda apunta, o apuntaba, a succionar todo lo que tiene algún valor verdadero a manos del gran capital. Frente a una posible debacle general en la que no se le podrá cobrar a nadie, ¿ya resulta el momento ideal para anticiparse con un default del fabricante de dólares? Tal vez la respuesta se vea en los próximos días.

Un pequeño ejemplo de lo que podría venir de inmediato de declararse un default en USA se puede ver en lo siguiente: México envía aproximadamente el 75% de sus exportaciones a Estados Unidos. ¿Qué sucedería en México, por ejemplo, si de un día para otro pierde las tres cuartas partes de sus ingresos por exportaciones y, lo que es más duro aún, en el futuro deja de poder exportar la tres cuarta parte de sus productos por la condición de moroso de su principal cliente?

jueves, 10 de octubre de 2013

La crisis y la oportunidad

Qué difícil resulta en estos momentos focalizar un problema en particular. O distinguir entre lo trascendente y lo que es poco significativo o que sobresale por pura frivolidad.
En estos días Ban Ki-mun, Secretario General de las Naciones Unidas, declara lo difícil que es el tema de la liquidación de las armas químicas de Siria, país en guerra en la que los investigadores se juegan la vida día a día en una tarea que, dicho sea de paso y a mi juicio, es más publicitaria y pour la galerie, que una acción concreta. Ya que los resultados serían imposible de justificar desde el punto de vista lógico. Probar que algo existe es fácil, basta encontrarlo. Probar lo contrario, la no existencia de algo, es absurdo.

En el interín, el mismo Secretario General hace la vista gorda a la intervención norteamericana en Libia, que caza en terreno ajeno a un supuesto terrorista sin el menor respeto por la propiedad privada, en este caso representada por la soberanía de un estado sobre su propio territorio.

Qué decir del cierre del estado norteamericano y la enorme masa de desocupados que eso produjo. Y el próximo potencial estallido de una tremenda crisis económica mundial si no se resuelve el presupuesto. El default por parte de Estados Unidos representaría, en realidad, el default de todo el sistema.  ¿Estaremos frente a la tantas veces pronosticada caída del Capitalismo? Con toda franqueza, no lo creo. El capitalismo demostró una y otra vez que se puede reacomodar a los desequilibrios y a los ataques más improbables. En este momento más que esperar la debacle del sistema, habría que pensar cómo será el sistema en el futuro. Quiénes van a pagar los platos rotos no requiere de mucha elucubración. Serán los desposeídos y los que menos tienen, como siempre. Y los países que no tienen la menor posibilidad de defenderse frente al poder militar más grande del mundo. Es decir, todos los países menos Estados Unidos.

Piloto de Drone - Avión de combate teleguiado

Si la crisis es oportunidad, como repiten muchos en un poco pensado ataque de optimismo y de seudocultura orientalista, habría que recordar que los muertos no tienen ninguna oportunidad.

miércoles, 2 de octubre de 2013

El ataque terrorista más grande de la historia

Hay ciertas realidades cuya calificación sólo depende del punto de vista del que las interpreta. La más simple es la de considerar revolucionarios o subversivos a las mismas personas. Y la historia suele preferir quedarse con la calificación que hace el vencedor.
Lo mismo suele suceder con los terroristas, cobardes asesinos o valientes patriotas.
Hasta aquí, no mucho más que un lugar común: todo es según el color del cristal con que se mira.

La página web del Smithsonian con el cartelito rosado
que notifica su cierre, junto al del Zoológico Nacional 

Pero hay una zona gris en que las calificaciones se vuelven más borrosas o erráticas. Y el caso de la caída del gobierno de Estados Unidos al negarle la Cámara de Representantes el presupuesto ¿cómo habría que calificarlo?

Dejar a la gente sin trabajo es una forma de crimen. Las parejas que se rompen, los hijos abandonados, los infartos y los cánceres, suelen acompañar a la pérdida del trabajo. En este caso, la caída del gobierno por falta de presupuesto afecta a ochocientas mil personas. Para mí, el Partido Republicano se acaba de mandar el ataque terrorista más enorme del que haya escuchado hablar en mi vida. 
¡Bien por el Tea Party! Directo al Guiness.